Catedral de Albi, un baluarte para la fe

El Coro de finales del S.XV. Catedral de Sainte Cécile. UNESCO. Albi

Acaba de entrar en la lista del Patrimonio Mundial de la Humanidad de la UNESCO. La catedral Sainte-Cécile de Albi, junto con el palacio fortificado de los obispos colindante, constituye un conjunto monumental único en el mundo. Visita de una joya singular del gótico meridional aureolada por la trágica historia de los Cátaros.  

El 22 de julio de 1209, Arnaud Amaury, legado del Papa y jefe de la cruzada católica contra los Cátaros, habría pronunciado una frase fatídica que estigmatizó la historia religiosa del suroeste de Francia: “Matarlos a todos, Dios reconocerá a los suyos”.

Triunfo de la fe

Torre. Catedral de Sainte Cécile. Albi

Con esta sentencia inapelable, autorizaba a los cruzados a masacrar sin distinción a los habitantes de Béziers (en la región de Languedoc-Roussillon) entre los cuales se encontraban algunos Buenos Hombres seguidores del culto cátaro que el clero católico de entonces estaba obsesionado en erradicar. Así que el despiadado abad prefirió aplicar el “principio de precaución” por si algunos de estos “satélites de Satán” fingían ser católicos…  Hacia finales de siglo XIII, con métodos así de expeditivos, los católicos consiguieron acabar con buena parte de la “herejía” cátara instalada en el sur de Francia. Y para hacer patente este triunfo, decidieron construir en Albi (a unos 150 km de Béziers) una catedral monumental, fiel reflejo del poderío de la fe católica. Porque Albi, junto con Toulouse, Carcassonne y Agen, fue uno de las cuatro diócesis cátaros presentes en Occitania a partir del siglo XII…

Gótico meridional

En una loma que domina el río Tarn, el obispo de la ciudad y jefe de la Inquisición, Bernard de Castanet, mandó construir en 1277 una verdadera “fortaleza de Dios”, consagrada a Santa Cecilia, mártir cristiana y patrona de los músicos. La catedral Sainte-Cécile de Albi es la catedral de ladrillos más grande del mundo y uno de los mayores y más hermosos referentes del estilo gótico meridional. Su nave única abovedada de 100 metros de largo (en forma de cuna rota) está reforzada por poderosos contrafuertes en forma de torrecillas semicirculares que, junto con el voluminoso campanario almenado de 78 metros de altura, le dan un aspecto de castillo amurallado, cuya austeridad vertical tan sólo está interrumpida por el baldaquino de estilo gótico flamígero de la entrada sur. Hará falta más de un siglo para acabarla y a lo largo de los siglos, la catedral estará continuamente enriquecida con nuevas aportaciones arquitectónicas, lo que hace de este excepcional monumento religioso un verdadero « libro de historia” del arte y de la arquitectura sacros, abarcando desde el siglo XVI hasta el siglo XX.

Monumento único

Si desde fuera la catedral parece una “mole” rígida y pesada, desde dentro, en cambio, deslumbra por la extrema riqueza y recarga escultórica y pictórica. Al entrar, lo que llama enseguida la atención es su espectacular bóveda pintada, la más grande de Francia, una obra maestra de la pintura renacentista realizada por pintores italianos en Francia. Tardaron tres años en cumplirla… Al representar la bóveda celeste – y parte de la cosmogonía relacionada con la historia del cristianismo – se ha pintado primero un fondo azul vivo con una mezcla de lapislázuli triturado, óxido de cobre y pigmento de glasto.  Cuesta creer que, desde el siglo XVI, la bóveda nunca haya sido retocada ni restaurada… En medio de los arabescos y follajes de plata, la bóveda cuenta los principales temas bíblicos de la Revelación, desde la Anunciación hasta la Parusía, pasando por la Transfiguración y la Coronación de la Virgen.

Otros elementos hacen de esta catedral un monumento único en Francia. Primero, la reja que separa la nave del coro, llamado jubé en francés. Aparte de la catedral de Albi, sólo la iglesia Saint-Étienne du Mont (Paris) y el Monasterio Real de Brou (Bourg-en-Bresse) tienen jubés. El de Sainte-Cécile fue añadido a finales del siglo XV y es uno de los más hermosos de Francia, una verdadera pieza de “encaje” de piedra de estilo gótico flamígero. El coro también está rodeado de un rico conjunto escultórico, con flechas de piedra y finas estatuas representando personajes bíblicos y nobles anónimos. Y no hay que olvidar el fantástico órgano del siglo XVIII, obra de Christophe Moucherel (maestro carpintero francés, especialista en construcción de órganos) de 16,4 m de ancho sobre 15,6m de alto), que domina el coro y el altar, adornado con querubines tocando instrumentos de música.

Reja que separa el coro. Catedral de Sainte Cécile. Albi

Grafitos y trompe-l’oeil (Trapantojos)


Esculturas y trapantojos. Catedral de Sainte Cécile. Albi

Las pinturas ocupan un lugar importante en la catedral y son uno de sus mayores tesoros. Patrocinadas por ricos obispos mecenas, servían tanto para contar cosas a la gente analfabeta como para agradar a la culta. Y no es para abusar de los superlativos, pero el conjunto de frescos de la catedral de Albi es realmente el conjunto pictórico de estilo renacentista más extenso que existe en Francia.  Famosísimo es el fresco que representa el Juicio Final (actualmente en vía de restauración) en la parte oeste de la catedral. En su origen cubría una superficie de 200 m2. Consta de tres partes, la tierra, el cielo y el Infierno con una interesante representación de los Siete Pecados capitales. La parte oeste alberga también 10 capillas, ricamente adornadas con pinturas en trompe-l’oeil del siglo XV – imitando el mármol o reproduciendo formas geométricas que recuerdan vagamente el estilo mudéjar – y estatuas, en particular una hermosa efigie de Santa Cecilia – obra del escultor italiano Stefano Maderno – vestida con una túnica verde y oro, la que supuestamente llevaba el día de su ejecución. La leyenda cuenta que su cuerpo fue encontrado incorrupto, en la misma posición en la que la representó Maderno…

La verdad es que los obreros italianos, empleados para la decoración pictórica de la catedral, se divirtieron un poco… Disimulados entre las venas que imitan el mármol se pueden distinguir animales, caras simiescas de personajes de teatro antiguo y anamorfosis eróticas a modo de “imágenes de Épinal”. También se han encontrado “grafitís” misteriosos… No tanto las típicas horteradas tipo “Pepe ha estado aquí – 2007” o “Ramona quiere a Paco”, sino mensajes dejados gravados en la piedra por obreros o niños del coro desde el siglo XVI hasta el siglo XVIII.

Por su belleza, singularidad y riqueza histórica, la catedral de Albi fascinará hasta a los más agnósticos y alérgicos a las visitas a  monumentos religiosos.

Ver más fotos de la catedral de Albi en Fototravel.net

Escrito por Santiago

No hay comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Whats New?

26 noviembre, 2013

Estabilizadores de imagen

Las vibraciones y movimientos indeseados, principalmente en las tomas de vídeo, son fenómenos que se pueden solucionar utilizando un estabilizador […]

21 noviembre, 2013

Por qué usar un flash externo

Alguna vez se te habrá ocurrido la siguiente pregunta: ¿qué más puedo hacer con un flash aparte de iluminar en […]

19 noviembre, 2013

Objetivo Samyang 24 mm

Un buen accesorio para la toma fotográfica es un lente gran angular, el cual permite imágenes de graqn calidad en […]

15 noviembre, 2013

El Flash en Retratos

El uso del flash en fotografía de retratos puede ser de gran ayuda para lograr tomas de diferentes estilos, ya […]

12 noviembre, 2013

Foto321com

En ocasiones pensamos que la fotografía se limita a tener una cámara con la cual tomar fotos en fiestas y […]

8 noviembre, 2013

YN 560 II y YN 560 III

Dos flashes de la marca Yong Nuo han ganado mucha aceptación gracias a su mejora en el software intuitivo asi […]

31 octubre, 2016

Consejos para realizar fotos de viajes

Consejos para realizar fotos de viajes Descubre cómo hacer fotos de viajes de una forma original y diferente. Estos sencillos […]

15 noviembre, 2011

De noche, desde el espacio

La Tierra vista desde el espacio, ya no es nuevo, pero si que lo és si la vemos de noche […]